Despojada, desalojada del eje natural, desestabilizada
La Doctora profundiza la filosofía del silencio. Alberto, Axel y Máximo la llevaron hacia la derrota de agosto de 2021.
La Doctora profundiza la filosofía del silencio. Alberto, Axel y Máximo la llevaron hacia la derrota de agosto de 2021.
Aunque El Poeta, sin el aval de La Doctora, se disuelva con la celeridad de la sacarina.
Aún celebran como hazaña lo que fue un catastrófico error que demolió la penúltima posibilidad de integración americana.
El desastre es colectivo. La mala política es sepultada por la catástrofe de la economía.
En un país de estricta cultura presidencialista, es cruel mantener un presidente debilitado por la perversa divulgación del propio discurso.
Los multiplicados fragmentos del peronismo se preparan para el trago espeso de cicuta de la segunda ronda.
En el primer partido de septiembre fue plebiscitado de manera contranatural. Y con profundidad.
Con los sindicalistas activos, con los gobernadores y minigobernadores en acción, el peronismo tradicional aspira dar vuelta el resultado.
Ocurrió en la Argentina irreal. Una metáfora pasional que contiene el atributo sublime del ridículo.
Al fin y al cabo, presidente puede ser cualquiera. Es joda.
Impunidad y lawfare. Dos puntas del segmento que marca la magnitud de la confrontación.
El gobierno de Alberto rescata del naufragio a los que acaban de estrellarse.
A medida que La Doctora extiende su poder, la oposición más dura sigue la agenda de la reconocida oposición mediática.
Mientras se entregaban a la sabiduría de la Mesa Judicial, La Doctora los embocaba con el ejercicio de la política.