
Kirchnerismo con guarnición de peronistas
Es el diseño del peronismo más complejo. No se re-significa ni se transforma. Apenas cede.
Es el diseño del peronismo más complejo. No se re-significa ni se transforma. Apenas cede.
Lo grave es que, en los centros de poder real, toman el vodevil nacional con alguna seriedad.
En la práctica, Axel y Alberto tienen en común sólo el mérito de haber sido seleccionados por La Doctora.
Gracias a Baruj Spinoza, el consultor sefaradí que desplazó a Durán Barba, El Equeco.
Buenos Aires, La Provincia Inviable, marca otra vez la diferencia.
Macri deja un territorio infectado de minas antipersonales.
Ideal escenografía para que estalle todo antes, incluso, del punto de partida.
El país inviable no puede ser gobernado sólo con el apoyo emblemático de los mayoritarios desposeídos.
Instalar la pregunta obvia que funciona como consigna.
¿Va a gobernar Alberto o La Doctora?
Ante la Nada (Macri), brota la perspectiva ilusoria de la Pena (Alberto).
El peronismo está quieto y espera, otra vez al borde del poder.
Hasta la frontera del 10 de diciembre, las decisiones le pertenecen al Ángel.
Desde el balcón del General, el Ángel siente de nuevo la ambición, las ganas de vencer.
Una lástima que la “nueva política” arrastre los mismos vicios escatológicos de la política vieja.
Macri banaliza, sin misericordia, el ocaso de su mala gestión.