Excesos del fiestero Cardenal Mc Carrick
En Roma, en París, en Washington, ya es público que se lo quieren llevar puesto a Francisco con la abdicación.
En Roma, en París, en Washington, ya es público que se lo quieren llevar puesto a Francisco con la abdicación.
“Es más conveniente que Kirchner venga para saludar al Papa que viene. No al Papa que se va”.
Decir El Cardenal, en adelante, puede presentar el riesgo comparativo de pronunciar, en el pasado, El General.