
Yira, El Ángel, yira
El Ángel ahora anda mal, "sin fe". Y por "la indiferencia del mundo" se entregó a la conducción del FMI.
El Ángel ahora anda mal, "sin fe". Y por "la indiferencia del mundo" se entregó a la conducción del FMI.
A cada Doctora le llega su Florencio Randazzo, El Loco. Y a cada Rodríguez Larreta le llega su Martín Lousteau,
Tardaron 13 años en recuperarse. Tratan de nuevo la problemática del poder. Vuelven a sentirlo cerca.
Al cierre del despacho, trasciende que ninguno de los dos, ni Massa ni Macri, se da por aludido.
"Por los radicales que se disputan a cuchillo".
La centro-izquierda brinda, con el ejemplo, tío Plinio querido, la gran sorpresa.
“El radicalismo se terminó, como partido, cuando comenzó a peronizarse”, confirma el especialista. Un radical NYC, de apellido fundacional.