Formosa es más fácil que La Matanza
Sostenida por los costados populares de la provincia inviable, por sectores esclarecidos de militancia y del peronismo de provincias.
Sostenida por los costados populares de la provincia inviable, por sectores esclarecidos de militancia y del peronismo de provincias.
Carrió, ya casi exterminada por el Ángel se queda afuera del pentágono. Para asustar, amaga con ser gobernadora.
Desfile de contratiempos, de anuncios entusiastas, sucesiones de equívocos y retrocesos.
El gobierno de Alberto rescata del naufragio a los que acaban de estrellarse.
Sorprende el reclamo de la Intervención Federal.
En plena peste. Es una tontería, más que un acto de mala fe.
Alberto no es partidario de liberar, ni oficialmente de indultar. Opta por hacer la plancha.
Mientras se entregaban a la sabiduría de la Mesa Judicial, La Doctora los embocaba con el ejercicio de la política.
La única oposición real, que registra -y respeta- La Doctora, es Clarín.
Construcción de poder inspirado en el liderazgo de culto y en el culto de la caja.
Con la cesión del rango, La Doctora queda estampada como la lideresa de la Revolución Imaginaria.
En vez de sentar las bases vulgares del capitalismo tolerable, prefieren ahuyentan a los inversores que tampoco existen.
“A gobernar que se acaba el mundo”. Es el mensaje para el jefe de gabinete con rango de presidente.
Los gobernadores también lo empoderan. Con la tecnología del silencio. Estampados en la pared.
La multiplicada centralidad de la miseria venció, con amplitud, a la estética de la producción.