Caricatura de gobierno kirchnerista
Construcción de poder inspirado en el liderazgo de culto y en el culto de la caja.
Construcción de poder inspirado en el liderazgo de culto y en el culto de la caja.
Con la cesión del rango, La Doctora queda estampada como la lideresa de la Revolución Imaginaria.
En vez de sentar las bases vulgares del capitalismo tolerable, prefieren ahuyentan a los inversores que tampoco existen.
“A gobernar que se acaba el mundo”. Es el mensaje para el jefe de gabinete con rango de presidente.
Los gobernadores también lo empoderan. Con la tecnología del silencio. Estampados en la pared.
La multiplicada centralidad de la miseria venció, con amplitud, a la estética de la producción.
Ya no le sirve -Alberto- ni a La Doctora ni a Clarín. Y faltan más de tres años.
Un conjunto de tomas, de cepos, decretos y manotazos signan un gobierno descontrolado que puede estrellarse.
Aparte, de rebote, Jared puede coronar la jugada, para su suegro, con el Premio Nobel de La Paz.
Final incierto. Ni La Doctora, ni Clarín, están en condiciones de sostener la beligerancia.
Uno de los dos expresidentes tiene que caer. En cana. La epopeya del poder conduce al riesgo de cárcel.
Falta encontrar la salida digna del encierro compulsivo. Pese al presuroso anuncio de la vacuna para el pueblo vacunado.
Desde la no política, Macri instala, otra vez, su recurso para hacer política.
La secta socialdemócrata del peronismo metropolitano, con escenografía radical, cogobierna con la complejidad estructural de La Doctora.