La etapa lazarista del cristinismo
Se los ve golpeados, turbados. Irritables, pero aparentemente inconmovibles. Decididos, como siempre, tío Plinio querido, a ir admirablemente al frente.
Se los ve golpeados, turbados. Irritables, pero aparentemente inconmovibles. Decididos, como siempre, tío Plinio querido, a ir admirablemente al frente.
Ocho Gerentes fueron oportunamente renunciados en Enarsa, la empresa estatal-artificial que merece ponerse de moda.
Confundir la pasión futbolera del ciudadano, con la evasión de los problemas más serios, es uno de los defectos orgánicamente
“LAN no piensa en irse de Argentina, la instrucción de Santiago es arreglar, como sea”, confirma la Garganta.
Una sucesión de balances apresurados se trata de legitimar a través de la frialdad inapelable del calendario.
La sentencia alude a la convivencia armónica entre las dos caras complementarias del poliedro kirchner-cristinista.
“Se larga por afuera y arrasa”. “Va por adentro” (del FpV). “Compite en las PASO”. “Es funcional a Cristina”.
Avanzan. No los detiene ni la realidad. Avanzan aunque parezcan situarse al borde del abismo. Aguantan y siguen.
“A Espinosa, cuando llegó Carbajales, en noviembre de 2011, se le vino la noche”, confirma la Garganta.
Tío Plinio querido, la Guerra-Divorcio, entre el Gobierno-Estado y El Grupo Clarín ingresa en el tramo de las “soluciones finales”.
Para entender el complejo poliedro del Kirchner-cristinismo, el Portal insiste en estudiarlo a partir de sus recuperaciones, de sus caídas.
El cristinismo se cuece precipitadamente en la salsa del Sistema Recaudatorio de Acumulación.
En su relación con el peronismo cautivo, La Doctora continúa la metodología cínicamente simple que aplicaba El Furia.