Menú

Thompson y Williams

Amado Boudou y Sergio Massa.

Jorge Asis - 6 de mayo 2011

Artículos Nacionales

Thompson y Williams«Presidenta, todos saben que Boudou es su favorito. Si lo escoge, y Boudou pierde contra Macri, la que va a perder es usted.
Pero si Boudou gana, la ganadora va a ser usted».

La Garganta indica que Cristina oscila entre la precaución y el olimpismo. Daniel Filmus, el psicobolche formado en Colonia Zumerland,  mide 4 o 5 puntos más que Boudou. «Pero Filmus nada tiene de nuevo para aportar. Y ella no lo soporta».

Porque tampoco El Furia lo soportaba. Desde que Filmus fue inteligentemente reticente, y se abstuvo de anotarse en aquel papelón de las testimoniales.
Si mide, aparte, es por el atributo de no ser obsecuente. Pero a esta altura el kirchnerismo póstumo lo que se necesita es obsecuencia.
Tomada, en cambio, el tercero en discordia, es demasiado buenito para mandarlo a pelear. Aparte, es el que mide menos de los tres.

Etiqueta negra

Ídolo del Municipio Urbano de la Costa, Amado Boudou, El Insaciable, es uno de los principales baluartes que se cuelgan del «Vestidito negro» (cliquear).
Pero, por favorito, es envidiado. Aparte de Cristina, a Boudou lo apoya la dupla Moyano-De Vido. De superlativa calidad moral. Y ahora también se anota Scioli, el Líder de la Línea Aire y Sol, acaso como retribución de favores.
Pero la Presidenta debe optar entre la medida que le marca el corazón, y las medidas pragmáticas de las encuestas.

Thompson y WilliamsSin embargo, por insaciable o por envidiado, Boudou emerge como gran generador de conflictos.
El último en enojarse, según nuestras fuentes, fue Randazzo, el ex killer convertido en un burócrata casi inofensivo.
Trasciende que Randazzo lo inculpa a Boudou de gestar una nota periodística en su contra. Lo afectó en demasía. Porque fue divulgada, según Randazzo, para desacreditarlo. Alude a la supuesta compra de ropita, por parte de Randazzo. Cincuenta mil pesos gastados en pilchas de Etiqueta Negra. Una tontería. Pero se descuenta que, detrás de los rencores, subyace algún dilema espiritual. Al no haber clima para el florecimiento de quioscos nuevos, aparece una sed de invasión hacia los quioscos viejos. Y Boudou es insaciable. Ampliaremos.

Caminos de Massa

La Garganta confirma que Boudou trafica con su influencia intelectual en las decisiones de «la Presidenta».
Thompson y WilliamsSuele jactarse -sin ir más lejos- de haber influido en la decisión de vetar la «colectora» de Massa. Es probable que desde aquí surja el incipiente amadismo de Scioli.

La colectora, alias «lista de adhesión», fue uno de «Los caminos de Massa (cliquear). La impulsa Tito Lusiardo, alias Juanjo, de los escasos peronistas culturales que mantiene el acceso a Cristina. Y no precisamente porque la Presidenta (a Lusiardo) lo valore. Pero se dispone a respetar el sentido de la agenda política de Néstor. Que ella hereda.
Si El Furia lo recibía a Lusiardo, ella también debe recibirlo.

«Pero Massa, hasta hoy, no pasa», confirma la Garganta.
Aunque Juanjo se haya esforzado. Pero es por resistencia personal de Cristina hacia Massita. Ninguna influencia ajena.

Thompson y WilliamsBoudou y Massa se conocen como Thompson y Williams. Desde el tiempo inmemoriablemente liberal de la secta UPAU. Lo suficiente para evitarse.
Massa considera que Boudou merece calificativos usualmente despreciables. Lo llevó a Boudou de pupilo a la caja del Ansés. Por pedido de Benigno Vélez, alias Maligno.
Hoy los dos, Maligno Vélez y Massa, conservan, a coro, deplorables impresiones de Boudou.

El Carapálida

Instalado en la rotonda del Cruce Etcheverry, a la audacia de Massa se le abren, de pronto, otros caminos.
Los medios informan sobre la decisión de hacer una interna contra Scioli, por adentro del PJ, para disputar la gobernación. Pero comienza a tratarse, en simultáneo, el camino de la aventura vicepresidencial. Con la esfinge de Roberto Lavagna, El Carapálida, como presidente.
Y con Narváez -infaltable en ninguna mesa moderada- para la gobernación de la provincia inviable. Siempre predispuesto para recibir las delirantes «listas de adhesión». Pero a la inversa, desde arriba. De aspirantes a presidentes que lo impulsan para gobernador.
Thompson y WilliamsPor supuesto, la fórmula Lavagna-Massa, dos de los tantos distraídos situado en el Cruce Etcheverry, hasta hoy está muy verde. Sólo puede prosperar si Duhalde es bajado por la realidad.
Admirablemente, Duhalde, el ensayista prolífico, Piloto de Tormentas (generadas) relanza su insistente candidatura. Felizmente sin la demencia reconfortante del Peronismo Federal. Avanza con firmeza, sin desviaciones, mediante un glorioso partidito de alquiler.

Relacionados

Depilación total de la Cultura PRO

La Civilización Milei supo captar para su identidad la música barroca de Federico Sturzenegger, El Bailarín Compadrito.

Oberdan Rocamora - 19 de diciembre 2024